Dos edificios con más de un siglo de antigüedad y reformados con un gusto exquisito componen el Hotel Can Simoneta, en Canyamel.
Los 14 metros de distancia entre el hotel y un acantilado hacen que sus vistas sean una postal inolvidable.
Las habitaciones decoradas con un gusto exquisito, su piscina exterior con solarium, el jacuzzi exterior con vistas al mar, acceso exclusivo y directo a la playa, hamacas colgantes, jardines y terrazas. Muchos son los elementos que hacen del Hotel Can Simoneta uno de los sitios más mágicos de Mallorca.
Mientras que el diseño ha corrido a cargo de su agencia habitual, 40 llamps, la programación ha salido de Refineria.
Un placer navegar por las entrañas de un sitio tan especial.
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